Layún- Un nuevo grupo de 15 personas volvió recientemente a la madre patria, Marruecos, poniendo así fin a años de sufrimiento y de secuestro en los campos de Tinduf.
Los miembros de este grupo, que han logrado huir de los campos de Tinduf para volver a sus familiares en la ciudad de Layún, tienen entre 20 y 29 años de edad.
En una declaración a la MAP, Mbarek Said (24 años) expresó su alegría por volver a la madre patria, llamando la atención a las difíciles condiciones de vida de los secuestrados en estos campos. El mismo llamó sus hermanos a seguirle los pasos y volver a sus familiares en la madre patria.
Por su parte, Hammada Ould Sidi (22 años), subrayó que su apego a su marroquinidad era el motivo de su decisión, asegurando que todos los saharauíes volverán, tarde o temprano, a su patria, Marruecos.
Mientras que Al-Hiba Ould Sidi, que había vuelto a Marruecos en 1992, expresó su alegría por ver a su hijo Hammada Ould Sidi volver a su país para vivir con los suyos, relevando que la situación que reina en las provincias del sur contrasta completamente con las alegaciones mentirosas divulgadas por la dirección del polisario en los campos de Tinduf.
Este grupo se añade a 137 personas, entre ellas 14 mujeres y 9 niños, que habían vuelto a la madre patria tras haber huido del sufrimiento de los campos de Tinduf, en territorio argelino.
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Los miembros de este grupo, que han logrado huir de los campos de Tinduf para volver a sus familiares en la ciudad de Layún, tienen entre 20 y 29 años de edad.
En una declaración a la MAP, Mbarek Said (24 años) expresó su alegría por volver a la madre patria, llamando la atención a las difíciles condiciones de vida de los secuestrados en estos campos. El mismo llamó sus hermanos a seguirle los pasos y volver a sus familiares en la madre patria.
Por su parte, Hammada Ould Sidi (22 años), subrayó que su apego a su marroquinidad era el motivo de su decisión, asegurando que todos los saharauíes volverán, tarde o temprano, a su patria, Marruecos.
Mientras que Al-Hiba Ould Sidi, que había vuelto a Marruecos en 1992, expresó su alegría por ver a su hijo Hammada Ould Sidi volver a su país para vivir con los suyos, relevando que la situación que reina en las provincias del sur contrasta completamente con las alegaciones mentirosas divulgadas por la dirección del polisario en los campos de Tinduf.
Este grupo se añade a 137 personas, entre ellas 14 mujeres y 9 niños, que habían vuelto a la madre patria tras haber huido del sufrimiento de los campos de Tinduf, en territorio argelino.
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